La tala ilegal de bosque nativo que deja sin agua a Chiloé

Posted by Socialismo Revolucionario on viernes, septiembre 05, 2014

Planeta Feliz

Una empresa agrícola que es parte de las inversiones que la Universidad de Harvard tiene en Chile, ha talado ilegalmente casi 80 hectáreas de bosque siempreverde de especies como Coigüe, Canelo, Tepú y Ulmo, para ser sustituidos por eucaliptos. En la isla no hay nieve ni glaciares, la función del bosque es almacenar agua y liberarla en las estaciones más secas…
Este verano Chiloé sufrió por el agua. Más de 80 localidades debieron ser surtidas con camiones aljibes. El año anterior también. Sus habitantes culpan a los eucaliptos de la Agrícola El Brinzal, propiedad de la prestigiosa Universidad de Harvard, denunciada en 2012 por arrasar con 76.84 hectáreas de bosque nativo y la sustitución masiva por la especie exótica que demanda altas cantidades de agua para su crecimiento. Por una de dos denuncias fue sentenciada a pagar algo más de 4 millones de pesos…
Algo anda muy mal. La historia partió con la denuncia de lugareños a fines de 2011 a la Asociación de Ingenieros Forestares por el Bosque Nativo (AIFBN), en Ancud. La ONG elaboró un informe que señala que la empresa desde 2010 ha adquirido 24 predios, unas 2.800 hectáreas en la zona; en dos de los predios se comprobó con imágenes satelitales y en terreno, la degradación y sustitución de “bosque adultos del tipo forestal siempreverde” como Coigüe, Canelo, Tepú y Ulmo, los que fueron destinados a leña y “como forma de preparar el terreno para la posterior sustitución por eucaliptos”.
Los hechos fueron develados públicamente en un reportaje del sitio de investigación periodística Ciper Chile, que detalla que había zonas donde se habían plantado eucaliptos a menos de un metro de cursos de agua y que incluso restos de la tala ilegal habían obstruido algunos de ellos. Con datos en mano, CONAF denunció al Juzgado de Policía Local de Ancud a El Brinzal, proponiendo una multa cercana a los 500 millones de pesos, que incluyen montos por incumplimiento de manejo forestal.
¿Y LA FISCALIZACIÓN?
Entre los antecedentes entregados, figuraban daños en 58 hectáreas que debieron reforestarse con especies nativas y no eucaliptos; por ello CONAF proponía una multa de 34 millones. La sentencia fue de 4.2 millones y obligación de reforestar con árboles nativos apenas 7 hectáreas.
“Nuestra institucionalidad forestal está haciendo aguas hace rato. Esto ocurre acá en la Región de los Lagos, ocurre en la Región de los Ríos con empresas forestales chilenas, en la Octava y así hacia el norte”, denuncia Javier Sanzana, de Ingenieros Forestales por el Bosque Nativo, en la última denuncia mediática en TVN.
En el reportaje “El bosque perdido de Chiloé”, además, se hace una seria denuncia contra CONAF, pues la sentencia habría sido tal porque la en fecha de tala ilegal ya estaba prescrita. El presupuesto de la entidad encargada de resguardar los bosques chilenos es de 4.000 millones para toda la Región de los Lagos, además de 300 millones de fondos regionales para consultorías. Para Chiloé sólo hay 4 fiscalizadores.
BOSQUES = AGUA
En Chiloé hay 5.400 hectáreas de eucaliptos que serían uno de los factores de la escasez de agua. En la isla no cae nieve ni tiene glaciares, por lo tanto depende del agua almacenada en el bosque, humedales, turberas y pomponales.“El bosque nativo lo que hace es almacenar agua y liberarla lentamente en épocas secas, diciembre, enero y febrero; si estamos perdiendo bosque nativo, directamente estamos perdiendo agua”, afirma en el reportaje Álvaro Montaña, geólogo.
HARVARD
Agrícola El Brinzal forma parte de un grupo mayor de empresas que la Universidad de Harvard tiene en muchas partes del mundo y que incluye inversiones en el área forestal en Brasil, Argentina, Ecuador, Panamá, Nueva Zelanda, Rumania, Letonia. Sólo en Chile –según informa Ciper- reconoce once sociedades, con nombres de fantasía y otras ligadas a localidades como Bucalemu, Retiro y Rapel.
En Argentina también se constataron irregularidades con su ley forestalsegún denuncia del diario El Tiempo. Las inversiones de Harvard allí, desde 2009 explotan más de 80 mil hectáreas cercanas a una de las mayores reservas de agua dulce en la zona de Esteros del Iberá, noreste argentino, considerada una joya ecológica por ambientalistas, y donde han hecho plantaciones masivas de pino.